Larvas astrales
La lógica nos invita a pensar que si existen microbios físicos que dañan el cuerpo físico, también existen microbios mentales que dañan la mente (Larvas, incubos, Súbcubos, basilic, dragones, etc., etc.).
Dentro de algún tiempo esa clase de microbios mentales serán visibles para todo el mundo. Ayer se inventó el microscopio para ver los microbios físicos, mañana se inventará el ultra-microscopio para ver los microbios del mundo de ultra.
Si existen las epidemias del cuerpo físico, también existen las epidemias morales oleadas de suicidio, robo, violencia, etc., etc. Esto se puede confirmar en las ciudades.
En ambos casos el agente son los microbios. Lógica es lógica.
Samael Aun Weor. Curso esotérico de endocrinología y criminología.
Usando Flor de Azufre en el Calzado, dentro, se desintegran las larvas del Cuerpo Astral, (Incubos, Súbcubos, basilios, dragones, fantasmas, etc.) Los vapores invisibles que se originan del Azufre se levantan desintegrando esas larvas. Quemando Azufre en ascuas de carbón, se desintegran las formas malignas del pensamiento y las larvas encerradas dentro de cualquier habitación.
No habléis de otros lo que no queráis que se hable de ti. Personas aparentemente muy bondadosas arrastran diariamente a sus semejantes hacia la cueva secreta de sí mismos, para hacer de ellos burla, escarnio y toda clase de vejaciones. Encontramos individuos que copulan sexualmente con la mente y se descargan de sus preciosas energías dando con ello origen a entidades ideoplásticas llamadas subcubos e incubos que luego van a seguir viviendo de su autor, robándole su vitalidad a través de las poluciones nocturnas.
Seres que a la vez que hablan de amor y paz sienten en su interior odio, envidia, rencor hacia los demás.
Samael Aun Weor. A los mil llegamos, pero a los dos mil no.
Paracelso dice al respecto en su obra “De origine morborum invisibilium Lit. III”:
“Incubos y Súbcubos se han formado del esperma de aquellos que realizan el acto antinatural imaginativo de la masturbación (en pensamientos o deseos). Y pues solo procede de la imaginación, no es un esperma auténtico (material) sino una sal corrompida.
Solo el semen que procede de un órgano indicado por la Naturaleza para su desarrollo puede germinar en cuerpo. Cuando el esperma no proviene de apropiada materia (substrato nutricio), no producirá nada bueno, sino que generará algo inútil.
Por esto Incubos y Súbcubos, que proceden de semen corrompido, son perjudiciales e inútiles según el orden natural de las cosas.
Estos gérmenes formados en la imaginación han nacido de Amore Heress, lo cual significa una especie de amor en el cual un hombre se imagina una mujer, o a la inversa, para realizar la cópula con la imagen creada en la esfera de su ánimo. De este acto resulta la evacuación de un inútil fluido etéreo, incapaz de generar una criatura, pero en situación de traer larvas a la existencia.
Una tal imaginación es la madre de una exuberante impudicia, la cual, proseguida, puede tomar impotente a un hombre y estéril a una mujer, ya que en la frecuente práctica de una tal imaginación enferma se pierde mucho de la verdadera Energía Creadora.
Los Yoes-larvas de la lascivia son verdaderos entes pensantes autónomos dentro de los cuales queda enfrascada un buen porcentaje de la Conciencia. Las larvas de las que habla Paracelso no son otra cosa que aquellas cultivadas formas de pensamiento que deben su fuerza y su existencia únicamente a la imaginación desnaturalizada.
Samael Aun Weor. Misterio del áureo florecer.
Los hombres masturbadores engendran súcubos y las mujeres masturbadoras engendran íncubos. Estas larvas incitan a sus progenitores a repetir incesantemente el acto que les dio vida. Tienen el mismo color del aire y por eso no se ven a simple vista. Remedio eficaz para librarse de ellas es llevar flor de azufre entre los zapatos. Los vapores etéricos del azufre las desintegran.
Samael Aun Weor. Tratado esotérico de medicina oculta y magia práctica.
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