La realidad

La Realidad o Nóumeno se mueve y vibra en todo el Universo.  

El punto de partida detodo verdadero conocimiento es la comprobación del incesante devenir de las cosas. 

Al respecto  de  esto  el  filósofo  Heráclito  dijo:  NO  ES  POSIBLE  METERSE  DOS  VECES  EN LAS AGUAS DEL MISMO RÍO, NI TOCAR DOS VECES UNA SUBSTANCIA MORTAL EN EL MISMO ESTADO. A CAUSA DE LA VELOCIDAD DEL MOVIMIENTO TODO SE DISPERSA Y RECOMPONE DE NUEVO. TODO VIENE Y VA.

Para alcanzar esta realidad siempre ágil, vibrante, se necesita de una mente verdaderamente serena  en  la  superficie  y  sobre  todo  en  lo  profundo,  como  la  mente  inmóvil  del  sabio  que es un espejo del Cielo y de la Tierra el reflejo de todas las cosas. Para ello es necesario comprender el aspecto vació de la mente, el no deseo y lo atemporal.

Nuestra conciencia activa, en estado de acecho, puede capturar esta realidad dinámica y a  partir  de  este  instante  se  establecerá  una  correcta  relación  o  diálogo  con  la  Conciencia Universal. Este es el alma de la DIALÉCTICA, o modo de llegar a la realidad de las cosas. Para el gran filósofo Platón, la Dialéctica es el arte del diálogo, considerando a éste último como una operación cognoscitiva o diálogo del alma consigo misma.

Si una parte de la Realidad no estuviera en nosotros, no tendríamos ninguna alternativa para llegar al conocimiento de la misma". Afortunadamente tenemos en la esencia o consciencia una parte de ella.

Pero, ¿cómo podemos permitir a la realidad que vive en nosotros se relacione y forme parte de  la Gran Realidad? Esto es posible  en  una  mente educada,  receptiva, y por lo tanto serena.

Al igual que la ciencia está basada en la observación de los fenómenos naturales con experimentos de laboratorio, nosotros podemos realizar estos experimentos con ejercicios de INTERIORIZACION, INTROS PECCION o CIENCIA DE LA MEDITACION.

Para adentrarnos en la realidad dinámica debemos considerar primero el CONOCIMIENTO IMAGINATIVO e INSPIRADO como cualidades intrínsecas del Ser. Debemos no ignorar que la Realidad se expresa en todo lo creado como una forma de la IMAGINACION y como un SENTIMIENTO de lo divino; El desarrollo armonioso de estas dos cualidades en nosotros imaginación e inspiración,  establecerá  una  correcta  relación  entre  la  GRAN  REALIDAD  y nuestra REALIDAD INTERIOR (la esencia).

Doctrina gnóstica develada por Samael Aun Weor