Los dos caminos

Dos caminosTenemos ante nosotros dos caminos: ante los que siguen la Directa, el camino de convertirse en Cosmocratores, o el de perderse dentro del Seno del Eterno Padre Cósmico Común.

Yo diría ¿para qué ser cada vez más y más jerárquicos entre el polvo de los mundos? Mejor es perderse dentro del Seno del Eterno Padre Cósmico Común, que tiene todos los poderes y atributos y toda la felicidad, este es un planteamiento que les hago a ustedes sobre los caminos y es muy importante eso, de manera que los Dioses han sido Demonios.

En todo caso los Dioses fueron Diablos y muchas veces un Dios Jerárquico como el Dios Neptuno se lanza al Abismo para resurgir más adelante más poderoso, Neptuno una vez aquí se dejó caer, pero bueno, hay Dioses que bajan al Abismo intencionalmente y se confunden con los de­monios y se desintegran, se vuelven polvareda cósmica.

Dioses que se caen, que se precipitan en el Averno; más tarde, más adelante resurgen más poderosos que antes, el Alquimista también tira la Piedra al Agua, más adelante le da la vida y es más poderosa que antes, eso es obvio.

P.- Interpelación (J.M.): Yo siempre he sentido profundo respeto por la Sabiduría del Mal. 

R. La Sabiduría del Mal es tremenda, pero tampoco pensemos... Bueno, y hay cierta razón, por ejemplo, en el Marqués de Sade que pensaba en la Liberación por el mal, en cierta manera tenía razón, obviamente al pasar por la Muerte Segunda el perverso, la Esencia queda liberada, eso es obvio, pero ¡que horrores y sufrimientos y todo, la pasada por el Averno es espantosa, espantosa! y sale al otro lado, pasando por los nueve círculos Dantescos.

P.- Interpelación: Bueno, y debe haber algo en la Sabiduría de los Círculos, porque no solamente uno ve en el camino de la luz, en el camino material yo he visto a muchos elementarios de la Naturaleza descri­bir círculos bellos sobre mí, unos de defensa, otros de protección, o­tros de información, círculos bellísimos. 

R. Así es, elementales son todo el mundo, todo el que no haya alcanzado el estado de Hombre es un elemental embotellado entre los Yoes, pero es un elemental. Si se destruyen los Yoes queda el puro elemental, el mismo que comenzó como mineral y como vegetal y que siguió como animal, pero es él mismo, al destruirse los Yoes queda el elemental, eso es, un elemental y nada más.

P.- Interpelación: Yo pienso que hoy forman parte como elementales, como Gnomos de la tierra, como Ondinas y Nereidas, como Silfos y Sílfides, que están en ese estado paradisíaco, tienen una gigantesca sabiduría e informan y dirigen acontecimientos.  

R. Si lo tienen porque está la Conciencia despierta, los elemen­tales son despiertos, pero lo que quiero decirte es esto, un elemental metido en cuerpo humano o metido entre una planta o metido entre un animal o viviendo en el mundo de las rocas, es el mismo elemental, yo lo he visto en los experimentos. Por eso el sujeto XX, un caballero que me escuchaba en el viejo Egipto de los Faraones, no era un Iniciado, ni mucho menos, pero si a­ceptó la doctrina de desintegrar a los Demonios Rojos de Seth, como decíamos en el Alto y Bajo Egipto, es decir, los yoes; hizo parte del trabajo en vida, desintegró dijéramos el cincuenta por ciento y después ­de muerto recibió instrucción, le enseñamos como se cierran las matri­ces, de manera que después de muerto, cuando aulló el Huracán del Kar­ma horriblemente, él permaneció sereno, impasible. 

Cuando los demonios tenebrosos lo atacaron con furia, él permaneció sereno, impasible; cuando la tempestad sobre su cabeza llovía con rayos y truenos, impasible; cuando llegó a cierto lugar donde copulaban hombres y mujeres, sereno, sin simpatía por nadie, ni antipatía por nadie, no buscó refugio en ninguna cueva en medio de la tempestad, porque sabía que buscar refugio en la tempestad equivalía a quedar prisionero dentro de alguna matriz.

Esa cueva sería alguna matriz, no busco refugio ni en nada ni en nadie, por último su Padre Madre lo sometió a terribles pruebas, per­maneció firme, los Sacerdotes del Templo le daban ayuda recordándole su propósito, que era el de no volver más al mundo; al fin y al cabo se le admitió en un reino de esos tantos reinos que hay en el mundo molecular, como el Tlalocalo, como el Reino de los Cabellos Largos o el de la Gran Concentración, en distintos reinos que hay allá, al fin y al cabo se le admitió en uno de esos tantos reinos y allí su Madre Di­vina le ayudó a eliminar los Yoes que le faltaban eliminar, y al fin la Esencia fue quedando libre y fue tomando una actitud muy hermosa, primero como el de una doncella de 14 ó 12 años, después tomó la forma de una niña muy hermosa, por último, convertido en un simple elemental femenino hermosísimo, tomó ese aspecto, así se sumergió entre el Gran Alaya del Universo como simple elemental.

Aquí también, en el antiguo México, muchos Iniciados hacían lo mismo y se apartaban del escenario, no volvían a tomar parte, es decir, elementales que no les interesaba más tarde alcanzar estaturas de Hombres ni de Dioses, ni de nada, sino que se quedaban siendo elementales den­tro del Gran Seno del Universo.

Algunos del México antiguo lo hicieron intencionalmente con el propósito de volver en la Edad de Oro, para en­trar en una escuela de Misterios y convertirse en Adeptos calificados, en tanto se apartaron de las evoluciones y de las involuciones y se retiraron del escenario cósmico y se sumergieron entre el Gran Alaya del Universo, mediante ese procedimiento nada más.

P. Venerable Maestro, ¿entonces esos elementales en la Edad de oro podrán regresar a tomar cuerpo?  

R. A tomar cuerpo si es su voluntad y entonces crear los Cuerpos Existenciales Superiores del Ser, convertirse en Hombres, más tarde en Adeptos y en Dioses, pero muchos de esos prefieren aplazar y algunos de ellos sencillamente no quieren ser Hombres, ni Dioses, ni nada, sino sencillamente quieren quedarse para siempre en toda eternidad como simples elementales sumergidos en el Gran Alaya del Universo.

De manera que hay de todo, hay individuos que han pasado por todos los ciclos de manifestación, por los 3.000 ciclos y que jamás crearon los Cuerpos Existenciales Superiores del Ser, ni hicieron el trabajo sobre sí mismos, esos al fin terminaron sus 3.000 ciclos de manifestación, se van, se sumergen dentro del Espíritu Universal de Vida como simples elementales, elementales con conocimientos del Bien y del Mal, pero Elementales.

Ser Hombre es algo muy distinto, cuando uno se convierte en Hombre, si deja de ser elemental para convertirse en Hombre, hay que crear los Cuerpos, haber hecho todo el Trabajo sobre si mismo, haber desintegra­do el Ego, haber creado vehículos, haber hecho de todo, pero hay muchos que prefieren quedarse como simples elementales, así pues, les he mos­trado a ustedes distintos tipos de gente.

Yo sigo el camino de la Directa, que es el camino más exaltado, pero también es el más difícil y el más peligroso, marcho por ese camino, la Directa  

P. ¿Venerable Maestro, por el camino espiraloide también se pue­de llegar a Hombre?  

R. El espiraloide no lo pueden coger sino los Hombres, únicamente los Hombres: cuando alguien se convierte en Hombre, tiene ante si los dos caminos: el del espiraloide que es Nirvánico ciento por ciento, que los Nirvanis rara vez toman cuerpo físico, y el de la Directa que va directo al Seno del Eterno Padre Cósmico Común, claro que los que se van por la espiraloide tampoco llegan a tener los mismos triunfos que tiene el que se va por la directa, no señores, tiene menos peligros.

El camino directo, por ejemplo, es tan terrible, que muy pocos lo pueden seguir, se aparta de las leyes de la evolución, de la involución, se revoluciona contra todo y contra todos, es un Rompecadenas por to­das partes, un camino de espada en mano contra si mismo, contra el mundo, contra todo, es la doctrina del Cristo Rojo en marcha, de un Cristo Rebelde que nada tiene de mentecato ni de mojigato, como el de las iglesias parroquiales, sino un Cristo Revolucionario y Terrible, ese es el camino de la directa, muy pocos lo pueden seguir.

P. ¿Venerable Maestro, el Cristo Rojo de los que cogen la directa, al final es el mismo Cristo del que coge el camino espiraloide?  

R. Bueno, indudablemente que el Cristo siempre es el Cristo, pero es que, dijéramos, los de la directa adquieren ciertos poderes, ciertas cualidades, ciertos atributos esotéricos profundos que no logra jamás el que va por el camino espiraloide.

El de la espiraloide se la pasa gozando del Nirvana, rara vez toma cuerpo, el de la directa renuncia a toda felicidad, se queda aquí abajo en carne y hueso, viviendo como un Hombre entre los hombres, luchando, sufriendo durante todo el Mahanvantara, a ver si logra al final del Mahanvantara sumergirse dentro del Seno del Eterno Padre Cósmico Común para siempre, y si no, le toca volver a seguir el mismo camino, hasta que al fin, en cualquier Mahanvantara lo logre, yo he venido siguiendo este camino durante varios Mahanvantaras y todavía no lo he logrado y voy por la directa y no lo he logrado.

P. ¿El Maestro Jesús Cristo lo logro?

R. Bueno, El sí lo logró, pero yo no lo he logrado, a ver si lo logro, no lo sé, por mi parte he resuelto renunciar a toda felicidad arriba y abajo y quedarme aquí, como se dice "a calzón quitao", a trabajar por la humanidad terriblemente, renunciando a toda felicidad, a todo paraíso y a toda dicha, es bastante duro eso ¿verdad?

Samael Aun Weor

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